sábado, 12 de noviembre de 2011

Diario de Edgar Nohales (MMR-Spiuk), VUELTA A BOLIVIA [ DÍAS 8 y 9 ]

“No hay carrera UCI que llegue a los 4.496 metros en los que se corona el puerto bien llamado "La Cumbre".”


11 del 11 de 2011, en La Paz, capital de Bolivia a 3.700 metros sobre el nivel del mar. Ahora descanso en un hotel de 5 estrellas, pero para llegar hasta aquí he tenido que pasar dos días de autentica miseria. Primero pediros disculpas porque ayer en Oruro no tenía Internet, por lo que contare las dos etapas...y vaya si tengo que contar...
Photo©: Maurizio Frazer


Salida de la séptima etapa, ya la salida impresiona a 3.800 metros subiendo en autobús desde Cochabamba. Pero lo peor estaba por llegar. Y es que nos dirigíamos al techo del mundo ciclista, no hay carrera UCI que llegue a los 4.496 metros en los que se corona el puerto bien llamado "La Cumbre".

60 km de tortuosa ascensión hasta llegar a esa altitud, con descansos, eso si, pero infernal, sientes como no eres capaz de ir rápido, no entra aire en los pulmones, boqueas, las piernas no encuentran el oxígeno...Por mucho que os cuente es imposible de describir. Y la cuestión es que no fui nada mal, de hecho hasta que quedaban menos de 10 km para coronar me mantuve sorprendentemente en los 30 primeros, pero cuando quedaban 5 km, me hundí miserablemente. ¿Cómo es posible ir subiendo a 15 por hora una rampa del 3% con aire de culo? Esto solo pasa en Bolivia...

Vi como me pasaban corredores sueltos y he tenido que hacer nada menos que 70 km en solitario para llegar a la meta de Oruro. Solo, absolutamente solo, miraba adelante y no había nada, mira atrás y la nada era absoluta.

Todo el mundo me decía que ya había pasado el peor día, pero se equivocaban, hoy viví el peor día de mi vida encima de una bicicleta. La etapa eran 160 km por el altiplano, todo el rato a 4.000 metros de altitud, y ya hoy no me encontraba muy bien. Salimos y a los 5 km, montonera y me pilla. No me hago gran cosa, pero el pelotón se marcha y soy incapaz de coger a dos grupos que me pasan.

Nada menos que 50 km he tenido que luchar contra el viento, junto un corredor del Potosí para alcanzar el grupo. Pero es que la tortura era terrible, porque en todo momento nos mantuvimos a no mas de 400 metros de la fila de coches, pero no llegábamos, al final apretamos a tope, cogimos a un venezolano que había parado a orinar y a otros dos bolivianos y entramos en el pelotón.

Ibon (que ha sido sexto en meta, ídolo absoluto, hasta le han tenido que poner oxigeno) me ha dicho luego que la cara de muerto que llevaba daba miedo. Pues me metí en el paquete y aire de costado, todo el día aire de costado y cuneta, cuneta y cuneta. Y cuando tienes el día gafe...

Lo tienes gafe, a falta de 55 km pincho la rueda trasera, esto si que es adiós muy buenas, para mi suerte me he juntado a otro que había pinchado y dos que se habían cortado y hemos hecho camino como hemos podido. Cada repecho de 300 metros parecía el Muro de Huy, horrible. Y los últimos 10 km...No había hecho 10 km más largos (llanos) en mi vida.

Hemos llegado a la meta en la ciudad de El Alto, ya solo quedan dos días (pero 4 etapas)...mañana descubriré el Lago Titicaca...pero tengo etapa por la mañana muy dura para llegar hasta allí...

Edgar Nohales, corredor MMR-Spiuk